A través de un durísimo comunicado, Santa Rosa pidió no ser dirigido por ningun árbitro de APAF… y le tocó uno de esa agrupación.

APAF es la Asociación Pampeana de Arbitros de Fútbol, presidida por el juez Cristian Rubiano a quien la dirigencia del Albo apuntó especialmente luego de la sanción a Maximiliano Acosta (5 partidos) por su expulsión en el choque del Provincial ante All Boys, que fue arbitrado por Diego Pereyra.

El club enfatizó que antes del partido de ida de esa serie habían pedido no ser dirigidos por ningun árbitro de esa agrupación por “considerarlos incapaces de arbitrar de manera imparcial y dudar de su honestidad” tras “episodios anteriores en los que fuimos evidentemente perjudicados”.

Tras resaltar que “los hechos nos dieron la razón” dispararon que “Rubiano y su gente han corrompido el espíritu de los torneos en los que se desempeñan en connivencia con quienes actualmente integran la Liga Cultural”.

También hubo críticas contra el Tribunal de Disciplina del Ente por el fallo y un lamento/bronca: “lamentamos tener que volver a encontrarnos con estas personas en un campo de juego”.

Con todo, la queja no surtió efecto parece: el partido ante Campos de Acha, por el Regional Amateur, el sábado, tendrá como juez –nuevamente- a Pereyra.